lunes, 20 de abril de 2009

El árabe en 12 palabras

En estos cinco meses no he puesto mucho interés en aprender la lengua árabe, más que nada por el esfuerzo que supondría aprender una lengua tan distinta a la nuestra y la poca utilidad que le veo teniendo en cuenta que la mayoría de los sauditas se defienden bien con el inglés. Sin embargo, nunca viene mal aprender unas pocas palabras para soltarlas cuando menos se lo esperan y ganarte a la audiencia, eso les encanta. He aquí las pocas que he podido aprender y que voy a escribir tal y como se pronunciarían en castellano:
  1. 'salamalecum': el saludo obligatorio, literalmente "que la paz sea contigo"
  2. 'alecumsalam': la forma de responder al saludo
  3. 'succram'= gracias
  4. 'mafi'= no hay
  5. 'múscala'= problema
  6. 'cabbira': grande
  7. 'sagguira'= pequeño
  8. 'mafi múscala'= no problem
  9. 'múscala cabira' = gran problema
  10. 'múscala sagguira' = pequeño problema
  11. 'iala'= vamos, venga
  12. 'jamsa' = cinco (la explicación de por qué el cinco es el único número que he aprendido es fácil: mi mesa está al lado de un call center y todos los números móviles de Arabia empiezan por cinco)
  13. 'aiouá' = sí
  14. 'insaala': literalmente "si Alá quiere", palabra de uso obligatorio si te refieres a algo que tiene lugar en el futuro

Y por último, la palabra que más me gusta y que sirve para múltiples propósitos: "jalás". Esta palabra comodín quiere decir que algo ha terminado, por ejemplo:
  1. Que has terminado la reunión: "jalás"
  2. Que viene el camarero y has terminado tu plato de comida: "jalás"
  3. Que te están sirviendo arroz y no quieres más en tu plato: "jalás"
  4. Que estás discutiendo un asunto con alguien y llegáis a un acuerdo: "jalás"
  5. Que pagas la cuenta y dejas unos riales de propina: "jalás"
  6. ... paradójicamente, la lista de usos de "jalás" es interminable

Esto se acaba (o no)

Apenas me quedan tres días por estas tierras y uno empieza a hacer balance de todas las experiencias vividas. Sin embargo ayer mi empresa me pidió que continuara dos meses más así que tuve que rechazar tan "tentadora" oferta. Este miércoles haré las maletas pero de aquí a un tiempo puede que pase alguna de estas cosas:
  1. Que no insistan más, encuentre un maravilloso proyecto en algún país occidentalizado y todos vivamos felices y contentos
  2. Que sigan insistiendo y yo acabe cediendo y tenga que volver alguna corta temporada
  3. Que acabe engrosando las listas del Inem

domingo, 19 de abril de 2009

Kuwait

Todos aprendimos a situar Kuwait en el mapa en agosto de 1990 tras la invasión por parte de Iraq y la conocida "Guerra del Golfo". Hasta aquel momento este pequeño estado había pasado desapercibido en el siglo XX, en el que lo más destacable fue el protectorado británico, el descubrimiento del petróleo, su independencia en 1961 y la alianza con Iraq en su guerra contra Irán.

El pasado fin de semana conseguí organizarme un fugaz viaje de fin de semana y visitar capital: Kuwait City. El viaje desde Riad tan sólo lleva una hora de avión y además de las aerolíneas nacionales, Jazeera Airways también ofrece vuelos de bajo coste entre ambas capitales. El visado se puede obtener en el mismo aeropuerto, a unos 15 euros al cambio (sólo admiten moneda Kuwaití así que hay que cambiar en el mismo aeropuerto).

La ciudad es como tantas otras que he podido visitar en el Middle East: grandes avenidas, enormes centros comerciales, tráfico desmadrado y altos edificios de oficinas, muchos de ellos aún en construcción. Lo bueno de Kuwait es que, dentro de lo que cabe, parece un poco más ordenado y tiene el encanto de un enorme paseo marítimo (la "corniche") en el que se suceden parques, playas y restaurantes. Tengo que reconocer que no encontré ni rastro de la Guerra por allí, había leído que algunos edificios aún mostraban señales de lo que pasó hace menos de 20 años, pero supongo que de nuevo el dinero que brota del suelo ha facilitado una rápida reconstrucción del país.

Por desgracia no conseguí librarme de una de las inclemencias que me vienen acompañando en Riad desde hace tiempo: la arena del desierto. Esa especie de bruma de color marrón hizo que fuera imposible sacar una foto en condiciones.

La marca de identidad de la ciudad, y probablemente del país, son las Torres de Kuwait, una especie de esferas insertadas en un pincho y decoradas con cerámica de color azul. Una de las torres se puede visitar y alberga un restaurante, mientras que la otra se utiliza como depósito de agua.


Otro de los edificios singulares es la Torre de la Liberación, una enorme antena de telecomunicaciones (está entre las 5 mayores del mundo) que recibe ese nombre porque la Guerra del Golfo interrumpió la finalización de su construcción durante unos años.


Sin embargo, lo que más me ha gustado de Kuwait es el sentimiento de libertad a pesar de encontrarme en un país rodeado de lo mejorcito del Middle East (Iraq, Irán y Arabia Saudí) y de que el consumo e importación de alcohol también esté totalmente prohibido. Donde más se nota esta libertad es en cómo viste la población, sobre todo la gente joven. Da gusto volver a ver a grupos de amigos y amigas hablando entre ellos, vestidos con pantalones, camisetas intentando ir a la moda europea, ¡si hasta pude ver alguna falda ligeramente por encima de la rodilla!

Otro aspecto llamativo fue el de ver a parejas que iban dadas de la mano por la calle... inaudito, ¡como si fueran dos amigos árabes! Y ya lo más transgresivo que he visto por la zona: ¡una pareja dándose un casto beso en el paseo marítimo a la vista de todos!

En resumen, una buena forma de escapar un fin de semana de la capital saudita y de estampar en tu pasaporte un sello de lo más exclusivo.

martes, 14 de abril de 2009

¿Arabes unidos?

Hoy he leído una noticia que decía que los talibanes habían matado en Afganistán a una joven pareja que pretendía huir del país para casarse. Su delito: él era de origen chií y ella de origen sunita.

Para poner en antecedentes a todo el mundo tenéis dos opciones: leeros la Wikipedia o bien este pequeño resumen de interpretación libre.

Allá por el año 632 D.C., Mahoma (PBUH) muere y sus seguidores se ponen a pensar quién será su sucesor al frente del Islam. Alí, el primo a la vez que yerno del Profeta (PBUH) - ¿? no me preguntéis sobre las extrañas relaciones familiares en aquella época - se proclama califa, pero es derrotado unas décadas después por Muawiya, el gobernador de Siria. La cosa no acaba aquí sino que se sucede durante generaciones de luchas entre tribus y familias hasta que definitivamente el cisma toma forma y las dos ramas se separan definitivamente.

Los chiíes consideran seguidores y sucesores de Alí, de hecho el término Chía viene de la expresión shī'at 'Alī, partido, facción, o seguidor de Alí. Por contra, los sunitas consideran que la sucesión de Mahoma (PBUH) corresponde a un árabe miembro de la tribu de Quraish a la cual pertenecía el Profeta (PBUH).

Los suníes, que representan entre el ochenta y el noventa por ciento de todos los musulmanes, son mayoritarios en todos los países árebes y del Magreb con excepción de Irán, Iraq y Azerbaijan. En Omán la mayoría es para otro grupo denominado jariyí (o carají), que no estuvieron de acuerdo con los argumentos de ninguna de las dos ramas principales y se fueron por su cuenta.

Con el tiempo se formaron diversas escuelas dentro del sunismo, siendo éstas las principales:
  • Hanafi: es una de las ramas más tolerante y flexible. Admite la analogía como fuente del Derecho.
  • Maliki, también llamada "Escuela de Medina": bastante rigorista, que no obstante, acepta los hadices (hechos ocurridos en tiempos del Profeta e interpretados por el mismo).
  • Shafi'i: otra de las escuelas más abierta y menos rígida del islam suní
  • Hanbali: se considera la escuela más rigurosa del islam suní. Para ellos, el Corán y la Sunna son Ley. Esta escuela jurídica no los considera únicamente una fuente del derecho. Abogan por una interpretación y una aplicación literalista del islam. En Arabia Saudí es escuela jurídica oficial, tomando la forma más rigurosa del wahabismo.
Los suníes reciben su nombre debido a la importancia que dan a la Sunna, colección de dichos y hechos atribuidos a Mahoma y transmitidos en forma oral. O sea que no sólo se basan en el Corán sino también en la Sunna, lo cual permite adaptar el Corán a las exigencias de la época.

En resumen, que como dice un compañero de trabajo, gracias a que existe Israel que es lo único que mantiene a los árabes unidos, que si no fuera por eso no pararían de matarse los unos a los otros.

lunes, 13 de abril de 2009

Diving Jeddah

Para mi segunda experiencia de buceo en el Mar Rojo me puse en manos de la empresa Desert Sea Divers cuyo dueño, un tipo llamado Abubaker, es de lo más popular y conocido en la zona, además de poseer todo un imperio de tiendas y personal a sus órdenes.

Esta empresa monta excursiones en barco desde una pequeña urbanización llamada "Dive Village" a unos 20 km del centro de Jeddah en dirección noroeste. Había reservado una plaza para los dos días del fin de semana, así que tras recoger el equipo pertinente, salimos en uno de los 3 barcos con capacidad para casi 20 buceadores y con todo lo necesario para pasar un buen día en el mar. Éramos un grupo de unos 15 entre americanos, libaneses y algún que otro saudita, muy buen ambiente y todo el mundo con ganas de pasarlo bien. Aparte del capitán, nos acompañaban un Dive Master que cuidaría de nosotros bajo las aguas y otro ayudante.

Todo iba de maravilla hasta que topamos con la Guardia Costera, la cual tiene que dar autorización a cualquier barco que quiera salir del puerto, y que debe de ser una especie de Guardia Civil en versión marítima, lo digo por la mala leche, ya que aquel primer día no dejaron a ningún barco salir a causa del viento (una brisita de nada).

Así que tuvimos que volver a tierra firme y gracias a Mr. Abubaker, nos metimos en la playa privada de un hotel donde tenía otra tienda y aquel día pudimos bucear desde la playa, la cual era una pasada, con una pared vertical de coral que llegaba hasta 40 metros de profundidad, pero tan sólo nadando desde arriba podías ver perfectamente, la transparencia era increíble.

Allí conocí a Allan, el que sería mi "buddy" o compañero de buceo ese fin de semana (recordad la primera regla del buceo: nunca, nunca, nunca bucees solo). Este tipo era un experimentado americano de más de 50 años que se había recorrido los mares de medio mundo y que, como tantos otros, intentaba pasar sus fines de semana en Arabia de la mejor manera posible. Lo mejor de todo es que llevaba una cámara de fotos con carcasa submarina, gracias a la cual he conseguido mis primeras fotos subacuáticas :-)


Nota: ésta es la primera y supongo que única foto que vereis de mí en este blog, espero poder seguir manteniendo mi anonimato por mucho tiempo.

El segundo día amaneció con una calma absoluta en cuanto al viento y ni una nube en el cielo, así que volvimos a probar suerte. Esta vez éramos unos 10 en el el grupo, mismo barco y misma tripulación. Entre ellos había unos cuantos americanos, tres azafatos y una azafata de Lufthansa, una pareja de saudíes que no buceaban y que simplemente se apuntaron para pasar el día en el barco y mi compañero Allan.

La zona costera de Jeddah está repleta de formaciones de coral donde además, unos cuantos barcos han quedado hundidos y son destinos muy populares para bucear. Aquel día sin embarco fuimos a otros tres sitios donde las formaciones de coral eran espectaculares, pudimos ver columnas de metros de altura y nadar alrededor de ellas como si estuviéramos metidos en un bosque.

Os dejo unas pocas fotos, espero que Allan pueda enviarme algunas más espectaculares.


Vista del arrecife de coral desde el barco

Uno de los tantos peces de colores junto al coral

Una raya con increíbles puntos de azul brillante escondida entre el coral